Odysseia


Odysseia

Taxidi
Trōikos Polemos
Doureios Ippos
Kindynos tou Kyklōpa
Katara tīs Kirkīs
Tragoudi tōn Seirīnōn
Epistrophī stīn Ithakī
Spiti

Odysseia tiene como tema el viaje de Odiseo.
Comenzando con la Guerra de Troya, Odiseo viviría muchas aventuras para regresar a Ítaca, su tierra natal. ¡Feliz Eleusinia!





Pintura original


Ulysses and the Sirens - John William Waterhouse


Lore de las canciones

Taxidi

Viaje. El viaje de Odiseo comenzó con su marcha a la Guerra de Troya, y continuaría durante muchos años tras el conflicto, surcando los mares hasta regresar a Ítaca, su hogar.

Trōikos Polemos

Guerra de Troya. La Guerra de Troya comenzó con el juicio de Paris. La diosa Eris dejó una manzana dorada para la diosa más bella, y el príncipe troyano Paris fue designado a elegir quién era la diosa más bella. Éste eligió a Afrodita, quien le prometió el amor de la mujer más hermosa, y ésta era Helena, la esposa de Menelao, rey de Esparta. Paris y Helena se enamoran y el príncipe la rapta y la lleva a Troya, causando que los aqueos marchen a la guerra para recuperarla. Entre los que navegaron a la ciudad de Ilión se encuentra Agamenón, rey de Micenas y hermano de Menelao, y también héroes como Aquiles y Áyax, además de Odiseo. Desembarcaron en la playa y cercaron la ciudad, pero los muros no caerían. En Troya gobernaba el rey Príamo, y sus hijos eran Héctor y Paris. Los aqueos saquearon templos, e hicieron esclavas a varias mujeres. Entre ellas estaba Briseida, quien fue entregada a Aquiles, pero más tarde, Agamenón la quiso, y al ordenar sustraérsela a Aquiles, éste se enfureció y decidió no volver a salir a la batalla. Con la ausencia de Aquiles, los troyanos tuvieron ventaja. Como los aqueos estaban en desventaja, Patroclo, el fiel amigo del héroe, salió a la batalla con su armadura para animar a las tropas. Se enfrentó en duelo con Héctor y éste le dio muerte. Cuando Aquiles supo de la muerte de Patroclo, su ira estalló. Aquiles y Héctor se enfrentaron en duelo, y el héroe dio muerte al príncipe. Sin piedad, ató su cuerpo a su carro de guerra y lo arrastró por la tierra, llevándoselo a su campamento.


Doureios Ippos

Caballo de Troya. Aquiles estaba enfurecido, y había llevado el cadáver de Héctor a su campamento, privándolo de los honores funerarios. El rey Príamo se infiltró en el campamento de los aqueos para suplicarle a Aquiles que devolviera el cuerpo de su hijo, y éste tuvo piedad y así sucedió. Los aqueos celebraron los funerales de Patroclo, y los troyanos celebraron los funerales de Héctor. La Guerra de Troya continuaba. La gran debilidad de Aquiles era su talón. Paris disparó una flecha, y guiada por Apolo, acertó a Aquiles en su talón, y el héroe murió. Se celebraron los funerales de Aquiles y juegos en su honor. Paris fue muerto por las flechas, y diversos príncipes trataron de reclamar a Helena. El astuto Odiseo tuvo una idea para conquistar la ciudad de Ilion. Los aqueos construyeron un gran caballo de madera, como una ofrenda a Atenea, y fingieron retirarse. De esta manera, los troyanos llevaron el caballo al interior de los muros, como un regalo de rendición de sus enemigos. Sin embargo, era una trampa, pues los aqueos estaban escondidos dentro del caballo. Por la noche, los aqueos salieron del caballo y abrieron las puertas de la ciudad. La caída de Troya era inevitable, y así fue como los aqueos obtuvieron la victoria. Finalmente, los aqueos regresarían a su hogar, y el barco de Odiseo salió a navegar por los mares.


Kindynos tou Kyklōpa

Peligro del Cíclope. Habían pasado diez años desde que Odiseo marchó a la Guerra de Troya desde Ítaca, donde había dejado a su esposa Penélope y a su hijo recién nacido, Telémaco. Navegando, llegaron a la tierra de los Cicones, donde destruyeron la ciudad de Ismaro, pero tuvieron que retirarse finalmente. Después llegaron a la isla de los lotófagos, los cuales ofrecieron loto a algunos miembros de la tripulación. El loto hacía que desearan quedarse en la isla para seguir comiendo, por lo que tuvieron que ser llevados a la fuerza al barco. Continuaron navegando, y llegaron a la isla de los cíclopes, aunque sin saberlo al inicio. Entraron en una cueva, donde encontraron comida y carneros. Mientras disfrutaban del manjar, el cíclope Polifemo entró en la cueva y cerró la entrada con una gran roca. Polifemo se comió a varios hombres, y luego se durmió. Odiseo tuvo una conversación con él, en la que le dijo que se llamaba Nadie, y le ofreció vino. No podían matar al cíclope, pues entonces nadie podría quitar la roca que bloqueaba la entrada de la cueva. Con Polifemo dormido por el vino, los hombres afilaron una estaca, y Odiseo la clavó en su gran ojo. Herido, el cíclope gritó que Nadie le había herido, y sus compañeros cíclopes no lo entendieron y se marcharon. Polifemo abrió la entrada de la cueva, y los hombres huyeron escondidos bajo los carneros. Una vez en el barco, Odiseo reveló su verdadero nombre entre gritos, y el furioso Polifemo, quien era el hijo de Poseidón, comenzó a lanzarles rocas, sin que ninguna lograra alcanzar el barco. Odiseo continuó con su viaje.


Katara tīs Kirkīs

Maldición de Circe. Poseidón estaba furioso con Odiseo por haber herido a Polifemo, y haría que éste tardara muchos años en regresar a Ítaca. El dios Eolo los iba a ayudar, pues le dio a Odiseo una bolsa con vientos, y le dijo que no la abriera, y así llegarían a su hogar. Sin embargo, cuando ya podían ver Ítaca desde el barco, la tripulación la abrió, y tras una tormenta, estuvieron perdidos de nuevo. Llegaron a la isla de los Lestrigones, terribles gigantes antropófagos, quienes devoraron a muchos miembros de la tripulación, y tan solo un barco de la flota pudo escapar. Llegaron a la isla de Eea, hogar de la hechicera Circe. Algunos miembros de la tripulación fueron a explorar, y solo uno de ellos regresó, contándole a Odiseo que los demás habían encontrado el palacio de Circe y habían sido convertidos en cerdos. Odiseo fue a salvarlos, y por el camino, Hermes le prestó ayuda, dándole una hierba que lo haría inmune al hechizo de Circe. Una vez en el palacio, Circe intentó seducirlo y convertirlo en animal, pero no lo consiguió. Odiseo y Circe hicieron el amor y su tripulación volvió a la normalidad. Tras un año, continuaron su viaje. Debían descender al Hades y preguntarle a Tiresias acerca del camino a seguir. Una vez en el lugar, Odiseo realizó libaciones y sacrificios para hablar con los muertos. Tiresias le predijo un viaje difícil. De nuevo en su barco, continuaron su viaje.


Tragoudi tōn Seirīnōn

Canción de las Sirenas. El barco de Odiseo continuó su viaje, y diversos peligros tendrían que afrontar. Pasaron por las rocas de las sirenas, criaturas que atraían a los marineros con su canto para luego devorarlos. Odiseo le dijo a su tripulación que debían usar cera en sus oídos para no escuchar el canto de las sirenas, y él estaría atado en el mástil, pues deseaba escuchar la melodía. Así sucedió, y el barco logró pasar las rocas de las sirenas. Seguidamente, tuvieron que pasar por las aguas guardadas por Escila y Caribdis, dos monstruos marinos, los cuales devoraron a muchos miembros de la tripulación. Llegaron a la isla de Trinacia, hogar del dios Helios. A pesar de haber sido advertidos por Tiresias y que Odiseo no dejaba de repetirlo, que no debían dar muerte al ganado de Helios, los miembros de la tripulación estaban hambrientos, y al final hicieron lo que no debían hacer. Los dioses estaban enfurecidos. De nuevo en el mar, una tormenta terrible se desató, y Zeus lanzó un rayo al barco que lo destruyó completamente. Todos los marineros sucumbieron excepto Odiseo, que sobrevivió, y fue arrastrado por las aguas.


Epistrophī stīn Ithakī

Regreso a Ítaca. Odiseo fue arrastrado por las tormentosas aguas hasta llegar a la isla de Ogigia, hogar de la ninfa Calipso. Allí vivió Odiseo durante siete años, pues Calipso no lo dejaba marcharse. Por orden de los dioses, Calipso debía permitir que Odiseo se marchara, y así sucedió. Odiseo construyó una balsa, y a pesar de la furia de Poseidón, logró alcanzar la isla de Esqueria, hogar de los feacios. Éstos conocieron su historia, y le ayudaron a llegar a su hogar. Los barcos de los feacios llevaron a Odiseo hasta Ítaca. Una vez allí, Odiseo tuvo la ayuda de Atenea, quien le informó sobre la situación en su palacio. Debido a su larga ausencia, muchos hombres se habían proclamado pretendientes, y aspiraban a casarse con Penélope. Su hijo Telémaco se había ido a Esparta para preguntar sobre el paradero de su padre. A su regreso, padre e hijo se encontraron y se reconocieron. Atenea transformó a Odiseo en un mendigo, y así éste fue a su palacio, y vio a los pretendientes faltarle el respeto a su hogar. Mientras tanto, Penélope, quien aún tenía esperanzas de que Odiseo regresara, tejía un sudario, con la promesa de que al terminarlo, elegiría un nuevo esposo. Sin embargo, por las noches deshacía el trabajo. Cuando fue descubierta, se vio obligada a tener que elegir. Estableció un desafío. Alineó doce hachas, y aquel hombre que pudiera tensar el arco de Odiseo y pasar una flecha a través de las doce hachas se convertiría en su esposo. Ninguno de los pretendientes logró ni siquiera tensar el arco. Odiseo, aún como mendigo, tensó el arco y disparó la flecha, resultando victorioso. Los pretendientes se dieron cuenta de que Odiseo había regresado, pero era demasiado tarde, pues Odiseo les dio muerte. Finalmente, Odiseo se presentó ante Penélope, quien dudaba de quién era, pero el héroe recordó que él mismo había construido su cama enraizada en el tronco de un olivo, y así su esposa lo reconoció. Tras el reencuentro, la familia ya estaba reunida.


Spiti

Hogar. Finalmente, Odiseo regresó a Ítaca, su hogar, y se reunió junto a su familia, su esposa Penélope y su hijo Telémaco, y fueron felices.